El Real de Sevilla, lugar de peregrinación para los flamencos durante décadas, se convirtió también en una costumbre para Camarón. Desde que tenía 13 años, Camarón no faltó a su cita.
La primera ocasión fue propiciada porque cantaores influyentes de la época animaron al cantante a asistir a una de las casetas más importantes. Rancapino, inseparable amigo de Camarón, consiguió para él el indispensable permiso paterno, pero, cosas de la edad se encontraron con unas muchachas, lo que retrasó su llegada a la caseta y a punto estuvo este incidente de que les echarán. Salvado el incidente, la voz y el estilo de Camarón asombró en la Sevilla Flamenca, que se hizo lenguas de ese prodigio que metía por bulerías "El Rosario de mi Madre" y parecía un viejo cantando con tan sólo 13 años.
El Rocío sería también el lugar donde conoció a importantes cantaores como Antonio Mairena y Juan Talega además de su futuro productor discográfico Ricardo Pachón.
Libro de la colección "TODO CAMARÓN", Editorial Altaya. pagina web. www.flamenco-world.com
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